Entradas

Mostrando las entradas de septiembre, 2016

Un sueño impulsado por la pasión...

Hay una anecdota recurrente que a mi mamá le gusta contar, más que nada en esta época del año que se acerca el desfile aniversario de Solano. Cuando tenía 3 años tenía que desfilar y me largue a llorar , supongo que por la cantidad de gente. A mi maestra se le ocurrió decirme que "toda esa gente me iba a ver a mi" y termine a upa de ella saludando cual "pequeña mis universo". Hoy , a menos de 2 semanas de la actuación de mi vida , a bastantes kilómetros de mi casa y sin mi vieja llorando como una marrana en mi campo visual , me gusta pensar que ese día fue cuando todo comenzó.  A los 5 empecé a bailar folclore porque mi amiguita del jardín lo hacía y en ese entonces era como mi pequeña ídola, me dió muchas satisfacciones , hasta llegamos a bailar tango (un recuerdo que hoy en día me llena de amor) . Lo hice hasta los 10 , cuando me tuve que cambiar de horario en la escuela y mi corta vida empezó a  ir por otro lado.  Baile muchos ritmos en pocos años y , aun así,

Ir para volver...

 Venia a mil por hora como en una carrera en la que estaba yo sola e igualmente parecia que estaba perdiendo, que en cualquier momento chocaba, hasta que decidi parar , pensar , no sólo a donde estaba yendo , si no tambien si era ahí a donde quería ir , pero no , estaba yendo para el lado contrario.  Mi mejor amiga me dijo que se mudaba a unos cuántos kilómetros de distancia. Senti que me estaban cortando un brazo , hice mal , se va del "perímetro" no del mundo. Me di cuenta que me uno demasiado a las personas , podría tranquilamente tatuarme un ancla en la frenre y usarla de DNI . No digo que ya no me importa , más allá de que el dia que se iba me dijo que cambiaba la mudanza por unas vacaciones muy largas, cai en la cuenta de que no estoy siendo un ser individual. Las personas que me rodean no deberían ser parte de mi, completarme , si no COMPLEMENTARME , dejar una huella, una enseñanza y tener la posibilidad de irse dejando una leccion en forma de recuerdo y no afectarme

Demasiado...

Aquella tarde un par de ojos con una luz propia que encandila se cruzaron en mi camino y me cegaron. Como en un acto de magia con dos simples pasos, nada por aquí , nada por allá, quedé atrapada en la locura mas hermosa.  Demasiado suave, demasiado áspero, todo terminó siendo demasiado. Empecé a correr pero parece que había tomado demasiada carrera y seguí de largo. El golpe fue demasiado , tan extremo como la misma carrera. Aún siento que jamás me voy a recuperar.  Entrelazada como en una soga, creí que todo estaba bien hasta que me enrede y caí. Era difícil pero si quería seguir caminando tenía que desatarme lo antes posible y seguir adelante. Mientras más tiraba más me enredaba, como si una parte mía quisiera seguir atada a aquel lugar para siempre, por más que doliera pero en el fondo sabía que lo tenía que aceptar, era demasiado.  Creí estar en lo correcto, creí tomar el camino adecuado que me llevaría hasta el lugar soñado pero el mapa estaba al revés y termine perdida como en

Sueño de libertad

 Un atardecer celeste, violeta y naranja. El mar, como si saliera de una montaña. Un barco se divisaba a lo lejos era viejo , de esos que te imaginas que el capitán tiene hasta la barba canosa y se fundia con el paisaje. Mis pies descalzos bailaban en la orilla como si la melodia fuera el ruido de la brisa.  Decidí levantarme a buscar mi celular pero, vaya uno a saber por qué, estaba en un lugar inalcanzable rodeado de porquerías.  Empecé a correr mientras sostenía mi vestido, de esos que jamás uso porque no me siento yo misma. Me paré, pestañee y ahora la foto es mental.  Obviamente era un sueño , con todos los condimentos para decidir guardarlo en una cajita en lo más profundo de mi alma.